Ubicada en la actual Santiponce, muy próxima a las rutas que conectaban con la zona de explotación minera de la Sierra Norte de Sevilla y Huelva, Itálica desempeñó un importante papel estratégico político- militar y económico durante el Alto Imperio romano.

Sus orígenes se remontan al 206 a.C., cuando el general Publio Cornelio Escipión, en el contexto de la segunda Guerra Púnica, derrotó a los cartagineses en la Batalla de Ilipa y estableció un destacamento de legionarios en el Cerro de San Antonio, lugar donde ya existía una población turdetana desde el siglo IV a.C.

Es en la segunda mitad del siglo I a.C. cuando la ciudad adquiere el estatuto municipal y, pasado el tiempo, durante el gobierno del emperador Adriano (117-138 d.C.), el de colonia, con lo que se equipara administrativamente a la metrópoli.

Cuna de Trajano y Adriano y de un buen número de prohombres del Imperio, su época de mayor desarrollo corresponde al reinado de ambos emperadores, cuando la presencia de un importante grupo de senadores de procedencia italicense en Roma propicia su crecimiento. Posteriormente, la ciudad fue decayendo económica y urbanísticamente entre los siglos III y IV, a medida que crecía la vecina Híspalis, hasta su desaparición definitiva en la época musulmana.

Itálica es el asentamiento romano más antiguo de la Península y el primero existente fuera del territorio italiano. Las excavaciones arqueológicas comenzaron en el siglo XVIII, entre 1751 y 1755, de la mano de Francisco Bruna.

Actualmente, el Conjunto Arqueológico de Itálica muestra al visitante un espléndido anfiteatro romano y da la posibilidad de pasear por el trazado de lo que fueron sus calles, así como de conocer las casas, edificios públicos, objetos de arte y utensilios de la vida cotidiana utilizados por sus habitantes.

En 2016, la Unión Cívica del Sur de España, CIVISUR, una asociación civil que reúne a profesionales de los más diversos campos de actividad, con el objetivo de desarrollar proyectos concretos de interés para la ciudadanía, encabeza la idea de impulsar la candidatura de Itálica a la Lista de Patrimonio Mundial de Unesco. Dos años después, en octubre de 2018, Itálica ha entrado en la Lista Indicativa de Sitios Candidatos a Patrimonio Mundial, paso previo para el reconocimiento por parte de Naciones Unidas.